Adela es la madre de Anita.
Su vida no ha sido fácil, siempre aceptando dinero a cambio de follar. Por eso,
tampoco niega el dinero de alguien por él que ha sentido lo único auténtico en
su vida.
Pero ese amor no puede ser. Él se ha equivocado, al querer darle a ella lo que de verdad quería darle
a otra mujer.
Adela, protectora de su hija,
de su corazón y de su vida abre las puertas al amor. Siente la carne de gallina
al oír las suelas bailando tango, como el rozar de la piel con al persona amada.
Y se siente destrozada cuando todos las nuevas ilusiones se caen, cuando su hija
cambia y cuando cree perderla en esa sexta protagonista: la ciudad.
Así, Adela decide "jubilarse"
para dedicarse a ser una buena madre y escribir un libro sobre la correcta
estimulación del clítoris. Un tema que los hombres no controlan, y que ella
conoce bien.
Las dos solas, de nuevo. Deja que
suene el timbre.
Yo, ya
sólo me dedico a la coordinación.
Sacar viruta al piso. Qué práctico.